¿Listo para sumergirte en una de las ciudades más fascinantes de Perú (y probablemente de toda Sudamérica)? Te cuento mi experiencia en Cusco durante septiembre de 2024, cuando partí desde Nasca en un bus de la compañía Cruz del Sur. Tras varias horas de carretera, llegué a la que alguna vez fue la capital del Imperio Inca y descubrí un lugar lleno de historia, tradiciones que siguen vivas y paisajes capaces de dejar sin aliento a cualquiera.
El viaje desde Nasca a Cusco
Después de disfrutar de las enigmáticas líneas de Nasca, decidí aventurarme hacia la sierra peruana. Opté por Cruz del Sur, una empresa de buses que, en mi experiencia, ofrece asientos cómodos, mantas, entretenimiento a bordo y algunas paradas estratégicas para estirar las piernas.
- Duración aproximada: Dependiendo de la ruta y el tráfico, el trayecto puede durar más de 14 horas.
- Recomendación: Lleva una chaqueta abrigadora para el clima frío de la sierra y, si es posible, unos snacks o frutas para el camino.
A pesar de las curvas de la carretera andina, cada kilómetro te acerca a paisajes espectaculares y a un Cusco que te recibe con sus calles empedradas y un aire místico único.
Primeras impresiones: Una ciudad llena de historia y belleza
Lo primero que me impresionó de Cusco fue la mezcla perfecta entre el pasado inca y la influencia colonial española. Puedes ver cómo se superponen muros de piedra inca con construcciones coloniales, formando un escenario histórico que parece sacado de un libro de leyendas.
- Plaza de Armas: El corazón de la ciudad. Rodeada de balcones de madera, restaurantes y la Catedral de Cusco, un lugar ideal para tomarte un café y dejar que la atmósfera cusqueña te envuelva.
- Calles empedradas: Mientras caminas, fíjate en la increíble simetría de los muros incas. ¡Te dejarán boquiabierto!
La cultura y las tradiciones todavía se sienten muy vivas. Verás a la gente local vestida con trajes típicos, ofreciendo artesanías o invitándote a probar platos como el cuy o la chicha morada.




Historia y legado inca: Conoce sus principales sitios
No puedes hablar de Cusco sin mencionar los lugares arqueológicos que rodean la ciudad. Estos son algunos imprescindibles:
- Sacsayhuamán: Una fortaleza inca en las afueras de la ciudad. Sus inmensas murallas de piedra encajan a la perfección y ofrecen vistas panorámicas espectaculares de Cusco.
- Qorikancha: El antiguo templo del Sol, una de las construcciones más sagradas para los incas. Después de la conquista española, se construyó la Iglesia de Santo Domingo sobre sus cimientos, creando un contraste increíble entre muros incas y arquitectura colonial.
- Valle Sagrado de los Incas: A poca distancia de la ciudad, con paradas obligatorias en Pisac, Ollantaytambo y Chinchero. Cada uno tiene su encanto particular y permite conocer más sobre la vida rural andina y sus tradiciones.

Costumbres y gastronomía cusqueña:
Una de las mejores formas de experimentar la cultura del lugar es a través de su comida y celebraciones. Si vas en septiembre como yo, la ciudad empieza a dejar atrás las festividades de mitad de año, pero todavía puedes encontrar eventos culturales y ferias en la Plaza de Armas.
- Platos típicos:
- Lomo saltado: aunque es un plato peruano general, en Cusco suele tener un sazón particular.
- Cuy al horno: un manjar local que puede sorprender, pero vale la pena probarlo si eres un viajero aventurero.
- Choclo con queso: el maíz gigante andino es una delicia que no te puedes perder.
- Bebidas:
- Mate de coca: perfecto para combatir el mal de altura.
- Chicha morada: refrescante y dulce, hecha a base de maíz morado.
Consejos para disfrutar Cusco sin contratiempos:
- Aclimatación: La altura de Cusco (alrededor de 3,400 msnm) puede jugarte una mala pasada. Tómate el primer día con calma, bebe mucha agua y prueba el mate de coca para aliviar los síntomas del soroche (mal de altura).
- Recorridos a pie: Cusco se saborea mejor caminando. Explora cada callejuela, cada esquina con encanto y las tiendas de artesanías. Un par de zapatillas cómodas es tu mejor aliado.
- Seguridad: En general, Cusco es seguro, pero como en cualquier ciudad turística, mantén un ojo en tus pertenencias y evita zonas solitarias de noche.
- Presupuesto: La ciudad tiene opciones para todos los bolsillos. Desde hostales económicos hasta hoteles de lujo, encontrarás una variedad de lugares para quedarte. En cuanto a la comida, puedes disfrutar de menús locales a precios muy razonables o darte el capricho en algún restaurante gourmet.
¿Y luego qué? Rutas cercanas para ampliar tu aventura
- Machu Picchu: La gran joya del Perú está a un par de horas en tren desde Cusco (o días, si optas por el Camino Inca). Sin duda, es el broche de oro para tu viaje.
- Montaña de Colores (Vinicunca): Una maravilla natural que se ha vuelto muy popular. Requiere un trek moderado a exigente, pero las vistas valen la pena.
- Laguna Humantay: Otra excursión de un día que combina caminata con un paisaje andino impresionante.

Conclusión
Cusco no es solo la puerta de entrada a Machu Picchu; es una ciudad que palpita historia, leyendas y un encanto único. Mi experiencia en septiembre de 2024, tras llegar en bus de Cruz del Sur desde Nasca, me mostró un rincón del mundo donde la cultura inca se fusiona con la herencia colonial, creando una atmósfera irrepetible. Ya sea que te fascine la arqueología, la gastronomía o simplemente pasear por calles con siglos de historia, Cusco te cautivará y querrás volver una y otra vez.
¿Te animas a descubrirlo todo? Prepara tu mochila, ajusta tus botas de trekking y deja que la magia de esta antigua capital inca te conquiste por completo. ¡Nos vemos en la próxima aventura!
Vuelo sobre las líneas de Nasca: Una experiencia única
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Autor: Jesús Martínez Rippe
Instagram: @jesusmartinezrippe